Invertir en equipos de fútbol

Si eres un gran aficionado al fútbol y dispones de unos ahorros para destinarlos a la inversión en bolsa estás de enhorabuena porque ya puedes comprar acciones de tus equipos favoritos. Manchester United, Brondy, Juventus, Betsikas o Borussia Dortmund son algunos de los clubes objeto de las apuestas bursátiles. Más si lo que deseas es invertir en clubes españoles, entonces tendrás que olvidarte de ellos, ya que ninguno de ellos, por el momento, cotiza en los mercados de renta variable.

 

inversión en futbolLos equipos de futbol europeos están integrados en un índice selectivo destinado para ellos, en donde están representados algunos de los más importantes del continente europeo. A partir de aquí, no habrá que realizar nada excepcional para formalizar las operaciones para adquirir sus títulos. Solamente, y como si un valor de la bolsa española se tratase, habrá que dar la orden de compra a través de los mercados europeos en donde coticen, y con las mismas comisiones que en otros valores más convencionales.

 

Pero claro está, su evolución en bolsa se rige por otros parámetros bien diferentes al de las compañías tradicionales. La consecución de un título, el fichaje de una estrella o sencillamente ganar su próximo partido pueden ayudar a que sus precios se revaloricen sensiblemente en los mercados, y por las razones contrarias, los precios pueden desplomarse bruscamente. Y en donde muchas veces, predomina más los resultados deportivos que las cuentas empresariales, como elemento diferencial de estas acciones.

 

Se tratan de valores muy volátiles, que dependen fundamentalmente del rendimiento deportivo de estos equipos. Y que tan pronto puede subir en su cotización un 10%, como por el efecto contrario, depreciarse en la misma magnitud. También se caracterizan porque no ofrecen una estabilidad en cuanto a la evolución de sus precios, ni por otra parte son seguidos con excesivo interés por parte de los brokers e intermediarios financieros, que prefieren centrarse en otros activos financieros. Y finalmente, no disponen de un precio objetivo medianamente realizable, por lo que el inversor finalmente tendrá muchas más dificultades para operar con ellos.