Aunque cada medio dispone de su propia estructura informativa, por lo general hay una serie de bloques que siempre aparecen en este tipo de información bursátil. Todos proporcionan alguna herramienta para que pueda tomarse la decisión correctamente, en función de las preferencias del usuario. Éstas son algunas de las que se ofrecen regularmente:
Actualización de la cotización: ofrecen las cotizaciones de la sesión bursátil del día, aunque en la mayoría de los casos no es en tiempo real, sufren un retraso tan solo de minutos. También se proporciona, en porcentaje, las ganancias o pérdidas en la misma sesión, así como el cierre del día anterior para comprobar la evolución del valor o índice.
Rango del día: es la oscilación que sufre el valor en una misma sesión y, sirve fundamentalmente para comprobar el grado de volatilidad que tiene el valor.
Rango de las últimas semanas: refleja el máximo y el mínimo en la cotización del valor durante las últimas sesiones o semanas. Es un dato muy útil para comprobar la evolución del valor en un horizonte más amplio que permite detectar su tendencia.
Variación anual: refleja el porcentaje de ganancias y pérdidas durante el ejercicio presente, básico en cualquier información de tipo bursátil, y, que indica la tendencia actual del valor.
Volumen de títulos: representa la cantidad de títulos diarios que se mueven diariamente en el parquet y, del que pueden traslucir los valores que tienen mayor liquidez o que son objeto de compras mayoritarias.
Capitalización: igualmente pone de manifiesto el grado de liquidez de una empresa, si es de alta, mediana o pequeña.
Rentabilidad por dividendo: es el porcentaje que proporciona este pago a los accionistas.
Últimos dividendos: refleja los últimos dividendos abonados por la entidad, tanto en cantidad como en fecha, y que puede servir de orientación para atisbar como será aproximadamente el próximo que otorgue la compañía.