¿Cómo podemos suscribir valores tecnológicos?

nuevas tecnologíasLos inversores españoles que deseen operar con valores tecnológicos lo tendrán francamente difícil si se centran en los mercados bursátiles nacionales. En primer lugar, y a diferencia de otras plazas internacionales, no existe un índice específico para reunir a estas compañías que están a la vanguardia de los procesos tecnológicos. Y además, porque están representadas por muy pocas empresas que cumplan con este objetivo, de forma que la oferta es completamente insuficiente para las expectativas que demandan estos inversores.

 

Como consecuencia de ello, si la opción de los minoristas en decantarse por alguna de estas empresas, no tendrán más remedio que acudir a los mercados internacionales. Preferentemente en Estados Unidos, donde el índice “Nasdaq” satisface totalmente sus demandas, con una de las mayores ofertas del mundo. Cotizan empresas de todas las características: informáticas puras, conductores, biotecnológicas, comercio online y, así con una larga lista de actividades empresariales.

 

Pero si no desea acudir a mercados bursátiles tan lejanos como el norteamericano, en Europa también hay una buena cantidad de propuestas que están representadas principalmente en las bolsas alemana, inglesa o francesa. Y ya más alejados, se encuentra la bolsa japonesa, otro de los paraísos para invertir en esta clase de valores. No obstante, los gastos para operar en ellos serán sensiblemente más caros. El motivo se debe al encarecimiento de las comisiones con respecto a los mercados nacionales, que prácticamente es el doble.

 

Siempre se encontrarán con las propuestas suficientes para encarar su inversión. A través de unos valores excesivamente volátiles, con unas diferencias entre sus precios máximos y mínimos muy apreciables en el mismo día, que pueden aproximarse al 15%, incluso más en las opciones más agresivas. Y que en cualquier caso, y por estas mismas características, son especialmente atractivas para realizar operaciones intradia, es decir, en el mismo día, o para aprovecharse de los movimientos tan verticales que desarrollen en buena parte de las sesiones bursátiles. Son precisamente los inversores especuladores son los que toman posiciones en estas empresas, para si se desarrolla un proceso alcista en poco tiempo, venderlas para recibir las plusvalías generadas.